Queridos Reyes Magos: Que sí, que ya lo sé, que llevo muchos años sin escribiros. Pero es que ya sabéis cómo es la gente, mucho poner vuestra imagen en el papel de regalo pero luego no se cree que seáis de verdad. Aunque la verdad es que yo tampoco me lo creía demasiado. ¿Qué le voy a hacer? Han sido muchos años de haber visto cómo los adultos (grupo al que desgraciadamente pertenezco) negaban vuestra existencia. Pero es que resulta que esta tarde os he visto por mi barrio. Los de La Elipa somos así de chulos y os montamos la cabalgata un día antes que el faraón que dirige el ayuntamiento. Y es por eso que os escribo. No voy a venderos la moto de que he sido buena. He sido como soy siempre. He ido a trabajar todos los días y sólo he faltado cuando he estado malita. He pagado mi alquiler y mis facturas puntualmente. Pero también he salido casi todos los fines de semana hasta el amanecer y me he emborrachado muchas veces. En mi descargo diré que todas esas noches de juerga y perversión han acabado conmigo solita en mi cama. Es decir, que ni una alegría al cuerpo me he llevado en ese 2006 que ya se acabó. Eso debería compensar mis otras malas acciones, ¿no? Sin embargo no os escribo para que me traigáis nada. Yo lo que quiero es que os llevéis cosas. Unas cosas son mías y otras no. A saber: -Quiero que os llevéis a mis compañeros de piso de una puta vez (a ver si así recupero la tranquilidad, que buena falta me hace). -Quiero que os llevéis esos kilos de más que me hacen marcar michelín cada vez que tengo la brillante idea de ponerme una camiseta algo más ceñida. -Quiero que os llevéis todos los síntomas de la resaca (ya que no f**** al menos dejadme practicar algún vicio sin consecuencias, coñe). -Quiero que os llevéis todo mi cansancio y esta depresión que me va y me viene cuando menos me lo espero desde hace tantos años. -Quiero que os llevéis las obras de mi ciudad de una vez por todas, que ya no creo que queden tesoros por descubrir bajo tierra (y si de paso os lleváis al alcalde, mejor que mejor). -Quiero que os llevéis pero bien lejos a todos los maltratadores, terroristas y sinvergüenzas en general, que la vida ya es bastante complicada como para que nos estén tocando las narices cada dos por tres. -Quiero que os llevéis los prejuicios y la estrechez de miras. Que ya estoy un poco hasta el bolo de que en mi oficina me pregunten quién hace de hombre y quién de mujer en las relaciones entre personas del mismo sexo. O que bromeen con el fontanero marroquí sobre su supuesta pertenencia a Al Qaeda. Y quiero muchas más cosas pero ahora que hemos retomado el contacto, no os las voy a decir todas de golpe, no os vayáis a quedar sin trabajo por mi culpa. El año que viene os quiero ver por aquí otra vez. Con todo mi cariño y mi fe recuperada, deseando que no se os haga muy larga la noche de mañana y que os llevéis todo lo que os pido, recibid un caluroso saludo, Arrierita P.D.: Sé que la gente os suele dejar anís y dulces. Yo sólo tengo el Cacique que sobró de Nochevieja y unas patatas fritas pero no está mal cambiar de vez en cuando, ¿no? P.D. 2: No os preocupéis por Chuchín Infernal. Él es tan discreto como yo y no se pondrá a ladrar cuando entréis en casa. |
jop...
que se lo lleven que se lo lleven...
(y por mi salud mental que se terminen ya las carrozas de una vez! que no tengo aparcamiento en el trabajo por su culpa y el almacen patas arriba!!!)
perra... el cazike era de mi padre...